Este conjunto de dispositivos tiene la función de evitar el sobrecalentamiento del motor mediante el uso de ventiladores de refrigeración del radiador, la medición de la temperatura del líquido de refrigeración y el control de los indicadores de nivel de agua y luz testigo de la unidad de control del motor.

Pueden tener uno, dos, tres o cuatro terminales y estar montados en el radiador, en los conductos del circuito de refrigeración o en el termostato, de manera que el elemento sensible (disco bimetálico o termistor) sea atravesado por el líquido refrigerante.

 

 

Elementos constitutivos y principios de funcionamiento

Los interruptores térmicos, accionados por un disco bimetálico cóncavo o convexo, abren y cierran los contactos presentes en su interior y se dividen en dos categorías:

- tipo circuito N/A normalmente abierto
​- tipo circuito N/C normalmente cerrado

Al variar la temperatura, el disco se deforma.

El disco es termosensible, de manera que, al alcanzar la temperatura de intercambio, se activa y cierra el circuito eléctrico.

 

 

Principales causas de mal funcionamiento

- Oxidación de los contactos

- Atasco del disco bimetálico

- Mal funcionamiento del termistor

- Pérdida de estanqueidad con la consiguiente entrada de agua o humedad en el interruptor

- Disminución de la elasticidad de las juntas de los conectores

 

Efectos del mal funcionamiento

Si el atasco deja abierto el circuito eléctrico, el interruptor no puede activar el electroventilador y se produce un sobrecalentamiento del líquido, que puede provocar daños graves en el motor.

Si el circuito eléctrico permanece cerrado, el ventilador sigue girando, ocasionando una pérdida de potencia.

Si el transmisor envía información incorrecta a la unidad de control, provoca el envío de mensajes de error y puede causar problemas en la regulación de la inyección.

 

Tipos de interruptores térmicos y transmisores de temperatura Facet

La tecnología Facet acompaña la evolución de la gestión térmica, proponiendo una amplia gama de soluciones: desde los más simples interruptores de disco, que controlan el ventilador de modo electromecánico, hasta los termotransmisores más sofisticados provistos de termistor, que envían información sobre la temperatura y señales de alarma a la unidad de control.

Es el tipo más sencillo de interruptor térmico. Provisto de disco bimetálico cóncavo o convexo, está montado en el radiador o en los conductos del circuito de refrigeración. El disco bimetálico es el elemento sensible que modifica su estado al variar la temperatura del líquido refrigerante. Al alcanzar una temperatura predeterminada, el disco se activa cerrando el circuito que pone en marcha el ventilador de refrigeración situado cerca del radiador.

 

Existen dos tipos de interruptores térmicos para electroventilador:

  - Para electroventilador de una sola velocidad (con un único circuito)

  - Para electroventilador de doble velocidad o para doble electroventilador (con varios circuitos)

Este interruptor térmico representa la versión más evolucionada del tipo simple con disco bimetálico. Además de activar el ventilador, tiene la función de indicar el momento en que el líquido de refrigeración ha alcanzado la temperatura límite, encendiendo un testigo en el panel de herramientas del vehículo.

Provistos tanto de termistor como de disco bimetálico, además de medir la temperatura del líquido refrigerante activan el testigo de alarma de la unidad de control.

Comunican con la unidad de control a través de indicadores con manecilla y señalan las alarmas a través de luces testigo cuando el líquido supera un cierto nivel de temperatura.